El último y a Primera

El último y a Primera

Hoy León o Correcaminos se despide de la Liga de Ascenso, esta noche uno festejará y uno sufrirá un año más.
El Sol de León
12 de mayo de 2012

Omar Oseguera Acevedo

León, Gto.- Para León o Correcaminos, esta será su última previa, porque ya es hora, porque ya lo merecen... por su gente... por su ciudad... por sus colores... porque han pasado muchos años... eternos, desesperantes, agónicos y sufribles.

Correcaminos y León hoy se juegan la vida, literalmente, uno llorará y el otro gritará y cantará como loco después de 90 minutos o un poco más, no aptos para cardiacos. La ventaja es del "Corre" por un gol, un gol que defenderán a muerte.

Para alguno de los dos ya es hora de salir del hoyo.

Por cada pase correcto o mal dado, por cada tiro, por cada barrida, por cada córner, por cada poste o por cada gol anulado, ya es hora; por esos días de concentración solitarios, por esas charlas técnicas, por cada regaño justo o injusto, por cada reclamo al compañero y al rival, por cada una de las mentadas de madre para sí mismos o para el de enfrente; por cada baño anticipado tras una expulsión, por cada falta obligada o sin querer, por cada palmada, por cada oración, por cada vendaje o por cada "torito" en el entrenamiento; por las inevitables lesiones, por cada pago puntual o retrasado o hasta por un contrato nuevo.

Por esos cientos de autógrafos y fotografías, por esas horas de incertidumbre en el Draft y hasta por salir del anonimato, "Esmeraldas" y "Naranjas" saben que esta noche se pueden olvidar de plazas como Altamira, La Piedad o Pumas Morelos para ir al Azteca, al Omnilife o al Universitario, saben que si ascienden habrán valido la pena todos aquellos triunfos que los llevaron hasta aquí.

Y lo harán por ellos, por su orgullo, por su carrera y por su futuro, por sus hijos y esposas, porque quieren trascender en el fútbol y convertirse en ídolos de todo un pueblo sediento de fútbol de Primera.

Ya no hay más tiempo, se acabó, el 12 de mayo de 2012 será un día histórico para uno de ellos, un día de gloria, una noche excitante y orgásmica en la que presumirán sus colores, su escudo y sus pasiones.

Dos equipos frente a frente en la última batalla, los dos mejores, los dos campeones; una cancha en la que nadie pudo ganar en el semestre, un estadio histórico con 2 mundiales mayores y uno juvenil; una afición que alienta como pocas, de las mejores, de las más sufridas, bipolar para muchos pero fiel hasta los huesos.

No hay más qué decir, hoy hay nuevo equipo de Primera... mañana aquí toda la historia.
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