dic 05, 2014
Óscar Jiménez
LEÓN, Gto.- La llegada de Pizzi al feudo felino no sólo habla en forma, sino también en fondo, y es que con él viajaron cuatro personas que estarán a sus espaldas trabajando, se trata de su cuerpo técnico con el que ha logrado cosas destacables.
RICHINO, INTENSIDAD A TOPE
El español Diario Marca, le ha otorgado a Alejandro Richino, nuevo preparador físico del Club León, el sobrenombre del ‘torbellino’, por el espectáculo que resulta verle en entrenamientos. El uruguayo, hace gala de dotes histriónicos e intensidad elevada durante la preparación de su equipo.
Al contrario de molestarse, jugadores de las plantillas en donde ha estado, al lado de Juan Antonio Pizzi, han referido que se trata de un tipo concentrado en su trabajo futbolístico, y en poner al cien a los elementos, que regularmente, bajo su cargo, suelen rendir más de lo esperado.
LAS ‘ARMAS’ SECRETAS
Dos viejos lobos de mar apoyan el trabajo de Juan Antonio Pizzi desde el Valencia de España. En primera instancia, Manuel Suárez está convertido en su mano derecha, y convertido en un tipo experimentado que marca la pauta durante momentos críticos del conjunto. Si algún día Pizzi no está al frente, el primer elegido respondería al apellido de Suárez.
TRABAJO MÉDICO CONJUNTO
El único sector donde se entrelazarán las personas del Club y las que llegan es la parte médica. El doctor Saúl Juárez se queda con el conjunto y para elaborar el dueto, llegará Claudio Ferrer, el kinesiólogo designado por Pizzi.
RECUPERAR LESIONADOS
La recuperación de los jugadores –que León dolió en el torneo pasado- serán el principal objetivo del cuerpo médico confirmado, que ya han tomado cartas en el caso Luis Montes, de quien se espera regrese en breve, para fortalecer a la institución.
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