Corazón de León

El Club León, el DIF Municipal y la Reina Infantil de la ciudad entregaron ayer 18 sillas de ruedas. Foto: Eduardo Maceira / El Sol de León.

El Sol de León
30 de agosto de 2012

César Toledo

León, Guanajuato.- Se mochan. Sensibilización y compromiso social fue lo que demostró la plantilla del Club León que por medio de su directiva, la Reina infantil de la ciudad, Ivanna I y el DIF municipal, donaron 18 sillas de ruedas a niños y jóvenes con parálisis cerebral y distrofia muscular.

Una sonrisa vale más que mil palabras y fue así como Brandon Ramírez Galván contagió a todos los jugadores del conjunto verdiblanco. El pequeñín fue elegido como la primera persona en recibir la donación de su silla de ruedas, en donde Óscar Mascorro e Ivanna I hicieron el simbólico cambio de la silla "viejita" a la nueva, lo que arrancó el aplauso y la sonrisa del propio Brandon que contagio a todos los presentes y que incluso logró hacer lagrimear a uno que otro verdiblanco.

Ya contagiados de la buena vibra y sensibilizados con la gran fuerza de voluntad y emoción que reflejaban los beneficiados, las sorpresas comenzaron a caer. Uno de los ganones fue Ángel Miguel Chagoya que recibió de Melitón Hernández unos guantes autografiados del cancerbero que disfrutó de la gran sonrisa y el abrazo que recibió a cambio de su noble gesto.

Así mismo, Luis Montes no dudó en quedarse descalzo para regalar sus tachones de juego, William Yarbrough hizo lo propio con sus guantes de portero e incluso se dio tiempo para calmar y secar las lágrimas de una asustada Lupita Hernández.

De la misma forma, el domador Gustavo Matosas señaló con una voz que denotaba emoción que "ustedes son una gran motivación para nosotros, porque estamos dando la mano a la gente que como ustedes siempre nos ha apoyado, los queremos y saben que pueden contar con nosotros, además hay que agradecer a nuestra Reina por hacer esto posible y sepan que estamos orgullosos de ustedes".

El agasajo fue tal que llegó el momento en que los propios jugadores sacaban turno para poder apapachar de cerca a los pequeñines que gozaron al ser el centro de atención de sus ídolos. Fotos, autógrafos y besos fue lo que recibieron los enlistados del DIF quienes al final terminaron por dar a todos los presentes una lección de vida y ese alimento al alma que siempre se necesita para volver a las raíces como seres humanos y recargarse de energía pura.