OCTAVIO ZÚÑIGA/CÉSAR TOLEDO / Publicada el 17/04/2014
Arizala, Fernando Navarro y Luis Montes celebran el primer gol de la noche. Luego, los bolivianos dieron la voltereta, pero Boselli alimentó la esperanza. Foto: MexSport
A la Fiera Libertadora le gusta el drama y después de salvar la tragedia en la cancha del Estadio León, va por la hombrada en el Hernando Siles, de Bolivia.
León caía 1-2 en casa, pero Mauro Boselli anotó con el pecho un dramático gol minutos antes del final y mantiene vivas las aspiraciones de avanzar a los Cuartos de final.
Los Verdes no encuentran la fórmula adecuada para vencer a un aparentemente débil Bolívar, que bajo la dirección del español Xabier Azkargorta le ha indigestado el sueño libertador al equipo de Gustavo Matosas.
El reencuentro entre los Verdes y el gol duró solamente un partido y después de generar un sinfín de claras oportunidades en el marco de Romel Quiñonez, no logran concretar en los momentos claves, dándole vida al rival.
Lo más grave es que “La Academia” descubrió que puede hacer mucho daño en el punto más débil del León: la portería.
El cuadro esmeralda empezó fiel a su costumbre, apabullando, atosigando, hostigando, “mordiendo” cada balón y centímetro de la cancha, generando sólo oportunidades.
Bolívar basó su defensa en la primera mitad, en una especie de embudo, con una línea de cinco que se cerraba en cada arribo de los Verdes, provocando más actividad por las bandas con Franco Arizala y Elías Hernádez.
Los Verdes abrieron el marcador al ‘21, a consecuencia del único pecado de Quiñonez, quien en una salida tardía quiso llegar a un balón que Luis Montes punteó con poco ángulo y acabó en la portería.
Los bolivianos emparejaron al ‘45 gracias a una jugada que comenzó con pase filtrado de Carlos Arce para Juan Callejón, que les ganó las espaldas a los defensores esmeraldas, quedando sólo ante un titubeante William Yarborough.
Lo impensado y crítico llegó al ‘70, en una jugada de contragolpe que comenzó Arce por derecha, corrió hacía el centro burlando a Fernando Navarro y a Jonny Magallón; entrando al área hizo una pared con Callejón, y concretó.
El panorama empeoró cuando Yarbrough erró un pase con el pie que derivó en una fuerte entrada de “Nacho” González, válida para ser expulsado.
El Estadio León enmudeció 10 minutos, hasta que el grito de “León, León” volvió a empujar al equipo.
Boselli, quien falló por lo menos cuatro claras, pagó su deuda y concretó con el pecho en un centro del recién ingresado José María Cárdenas.
La Fiera sacó el empate a dos que la deja con vida para buscar el milagro en La Paz, donde necesita ganar o bien empatar por más de tres goles.
El sueño libertador se ha vuelto casi una ilusión, en la que Matosas y sus jugadores tienen apostado todo el éxito de esta temporada, ahora van por todo, para no quedarse en un descuido, con las manos vacías.
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