CÉSAR TOLEDO / Publicada el 14/04/2014
Mauricio Castañeda e Iván Pineda tocaron la pelota que terminó como el primer gol del duelo, aunque luego Toluca apretó en ataque y consiguió la voltereta en el Nemesio Díez.
La Liguilla se ha alejado de las tierras del campeón. En el infierno, León dejó ir una oportunidad inmejorable de posicionarse en zona de calificación y con un cuadro alterno cayó 1-2 ante un Toluca.
Gustavo Matosas volvió a enviar mensajes sobre la cancha. Esta liga y el posible refrendo de su campeonato es de los chavales, pues serán ellos quienes cierren el torneo ante Tigres y Xolos.
Esos duelos pueden ser casi de trámite, pues la Fiera está hoy a tres puntos de zona de Liguilla, con sólo seis unidades por disputar.
Sin embargo, aunque la prueba no fue del todo superada, los juveniles verdiblancos se pararon con ilusión y por momentos dieron la sorpresa en el Nemesio Diez, hasta que el calor los dejó fundidos.
A León le costó el manejo del partido, pasado más por la inexperiencia de sus jugadores. Con tres debuts en la cancha, dos de ellos en la central con Agustín Palafox y Cristian Torres, la fortuna les sonrió en varias ocasiones, pero terminaron por aquejar al poco entendimiento en la marca y de milagro no llegaron los goles de arranque.
Si bien hubo poco volumen de juego en el medio campo leonés, los esmeraldas tuvieron el partido en sus manos a pesar de ser dominados totalmente por su adversario. El tanto de la ventaja lo consiguió Iván Pineda antes de los veinte minutos, cuando más apretaba el Toluca.
El balón enviado al área producto de un tiro de esquina fue rematado por Sebastián Maz para que “Santana” empujara. A los pocos minutos, Maz perdonó el segundo en un remate en solitario que mandó al cuerpo del portero César Lozano.
Pero Toluca era más equipo y apretó el acelerador para compensar el marcador. Lo intentó por muchos medios, de cabeza, a quemarropa y con paredes en el área , pero era inútil ante la engrandecida figura de Christian Martínez, quien sacó por lo menos cuatro de gol, dos de ellas en la línea.
Para desgracia leonesa, el cayó con los disparos de media distancia en dos momentos importantes del partido. En el ocaso de la primera mitad, Christian fue sorprendido por Gabriel Velasco con un tiro raso y a la esquina, imposible por más que se estiró.
Después, en el amanecer del complemento, Óscar Rojas recetó la misma dosis. Desde fuera del área mandó un zapatazo para convertir la voltereta.
El gol no liquidó, pero sí propuso un partido al contragolpe para Toluca, que pudo convertir por lo menos en dos ocasiones más, pero no tuvo éxito por las atajadas de Martínez.
León murió proponiendo. Con el cuchillo entre los dientes se volcó al ataque, pero las pelotas terminaban en centros sin fruto o con tiros muy lejanos.
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