REGINA YÉPEZ / LEÓN, GTO. Publicada el 17/04/2015
Rafael Márquez dejó al León en la Jornada 2 del Apertura 2014, luego de ganar dos títulos entre 2013 y 2014.
Los números no mienten, ni intentan descubrir el hilo negro, sólo se encargan de mostrar lo complicado que ha sido para la zona baja verdiblanca llenar el hueco que dejó el michoacano desde la Jornada 3 del Apertura 2014, su último torneo en México.
Con él en la cancha, la Fiera disputó 50 partidos en cuatro temporadas y recibió 51 goles promediando una anotación por partido; sin “El Káiser”, los Verdes han permitido el mismo número de anotaciones, pero en casi la mitad del partidos, 28.
Así, el promedio de anotaciones casi se duplicó para el cuadro que ahora dirige Juan Antonio Pizzi, en el cual se ha extrañado esa solidez y liderazgo en la defensa, pues ni Jonathan Bottinelli, ni Ignacio Canuto han podido llenar sus zapatos.
“Ojalá pueda hacer olvidar a Márquez” fueron las primeras palabras de Bottinelli cuando llegó al Bajío para incorporarse al cuadro esmeralda; las cifras, sin embargo, dicen lo contrario. En 19 partidos que ha participado, León ha recibido 30 anotaciones.
El tema del “Tato” no es diferente, el también argentino se incorporó a los Esmeraldas en el Clausura 2015 y no sólo con el objetivo de suplir al actual jugador del Hellas Verona, sino reforzar esa zona que se notaba ya un tanto débil.
“Sé que será difícil tapar el hueco de Rafa por las características y cualidades que tiene, no sé si estaré a la altura, pero ojalá sí, dejaré todo de mí para el club”, dijo Canuto a su llegada a León.
Luego de dos partidos recibiendo cinco goles, los Esmeraldas sólo permitieron uno en el Omnilife y suman un total de 24 dianas en contra; pero de continuar así, y con cuatro duelos más por jugarse, el Clausura 2015 podría convertirse en el torneo en el que León, desde su regreso, reciba la mayor cantidad de goles.
Se fue con goleada
El último partido que Rafael Márquez jugó con el León fue el sábado 26 de julio en el Estadio Universitario, de los Tigres.
En aquel compromiso, la Fiera perdió 4-2 ante los del norte. “El Káiser” jugó los 90 minutos, pero su presencia no evitó la goleada lograda por un doblete de Darío Burbano, más dos goles de Emmanuel Villa y Juninho. Por los Esmeraldas descontaron Chema Cárdenas y Mauro Boselli.
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