El fiero empate del León en el último minuto fue un premio a la actitud de los jugadores que no dieron el juego por perdido.
Gustavo Matosas se reconoció encantado con sus dirigidos.
“El partido se puso cuesta arriba con el 2-0, pero es un premio al esfuerzo de los jugadores y a que no desistieron en buscar el arco contrario”, dijo. “Me gustó que no bajaron los brazos, eso me encanta”, añadió.
La crisis de goles ha sido una constante para los Verdes este torneo; sin embargo, ayer la ofensiva respondió y se repuso de una desventaja que parecía llevarlos a la lona, lo que deben seguir trabajando, reconocío.
Matosas aceptó que tardaron en caminar, sobretodo en los primeros 15 minutos, en los que se vieron dominados, pero un movimiento con Rafael Márquez en su esquema le funcionó.
Nery Castillo no viajó con el equipo debido a una lesión.
“En este año muchos jugadores terminan contrato, llegarán cuatro o cinco refuerzosy veremos cómo se recupera Maz”, concluyó.
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