viernes, 16 de mayo de 2014

¡Vibrante!



¡Qué final! Qué hermandad ni que nada. León y Pachuca jugaron con todo.
El Sol de León
16 de mayo de 2014

Omar Oseguera

León, Guanajuato.- ¡Qué final! Qué hermandad ni que nada. León y Pachuca jugaron con todo. Regalaron 5 goles, errores, soberbias atajadas y un triunfo dramático del Pachuca por 3 a 2 en este el capítulo de ida.

El "Tuzo" lo ganó gracias a un doblete de su líder de goleo Enner Valencia y un tanto más de Lozano, pero también gracias y mucho, a un viejo pero efectivo "Conejo" Pérez, quien terminó por ser el héroe de los hidalguenses.

Y es que Elías Hernández y todo el León vieron adentro el 3 a 3 en tiempo añadido, el disparo llevaba efecto, colocación y fuerza, pero el manotazo del "Conejo", que no va con su edad pero sí con su capacidad, lo arruinó todo.

Así el campeón salió herido de los primeros 90 minutos de la final y eso es malo, pero a la vez peligroso para el Pachuca, pues sabe que el domingo a la 8, se topará con una Fiera necesitada de goles, hambrienta y molesta por sus errores de marca.

DOMINIO no reflejado

Arranque a todo vapor tuvo la final, intenso, sin respiro y con el "Conejo" Pérez salvado rápido por su travesaño tras tiro del "Gullit" Peña precedido por una extensa jugada felina a uno y dos toques.

Los primeros 20 minutos fueron sin tregua y sin el invitado de milagro porque Darío Carreño cabeceó justo a la ubicación de Yarbrough y porque un cañonazo de Mauro Boselli pasó a centímetros del arco.

La Fiera metió al "Tuzo" en su campo, lo acorraló, no lo dejó salir, pero no pudo hacerle daño. Media hora y el Pachuca logró bajarle el ritmo al partido, por fin. Sin embargo en un córner apareció el "Gullit" para con sus rizos rematar al poste más lejano de un inerte "Conejo" Pérez que sólo vio viajar la pelota.

Gol del campeón y respuesta inmediata del "Ojitos" Meza sacando al impreciso Darío Carreño, para meter al mediocampista Erick Gutiérrez y adelantar así a un desaparecido Damm en todo el primer tiempo.

Pachuca frenó con más gente en mediocampo las triangulaciones entre el "Gullit", Montes, Cárdenas y Boselli, defendía su campo con los once y jugaba al desdoble a máxima velocidad. Estrategia arriesgada pero exitosa, ya que al 41´, en un balón parado, Enner Valencia firmó el 1 a 1 cuando la visita prácticamente no había pesado al ataque. Ahí Magallón perdió la marca y de nada sirvió el trajín felino. Como inició la batalla se fue al descanso.

TUZO: letal

Pachuca corrigió todo lo que hizo mal y en el complemento se jugó otra final, de ritmo semilento, como les gusta a los "tuzos" y no a los "panzas verdes". León dejó de ser dinámico de pronto, Montes y Peña se desconectaron y Boselli no pudo, en remate solo dentro del área, vencer a Óscar Pérez en lo que pudo ser el 2 a 1.

Dicha falla, Enner Valencia la hizo gol en la otra área. Otro centro pasado le hizo daño al León y el campeón de goleo del Clausura facturó con la testa para callar al Estadio. Pachuca ya era mejor que el campeón, con puros centros, pero mejor, más peligroso que tres minutos casi hace otro tanto con el mismo Valencia, frenado, ahora sí, por el portero Yarbrough.

Ante el panorama, Matosas sacó a un tocado Luis Montes para abrir más la cancha con Elías Hernández y también ingresó a Miguel Sabah en lugar de Jonny Magallón. León buscaba otra forma, por el centro era imposible. Y en ese intento por empatarlo rápido, dejó espacios atrás que Hirving Lozano aprovechó para meterse al área por la izquierda y vencer a Yarbrough con un tiro que no llevaba colocación pero sí mucha fuerza, la suficiente para superar el tímido achique del cancerbero.

Era un Pachuca letal, que después se volvió a meter a su campo para permitir que el León se le fuera encima con centros bien rechazados, hasta que uno en diagonal fue peinado, por la inercia, por el zaguero Miguel Herrera para el 3 a 2 de drama y necesario de una digna final de ida.

En el añadido ocurrió lo arriba relatado, el "Conejo" y Pizarro evitaron el empate y confirmaron que estos dos equipos no se quieren como hermanos, pero sí se pelean como tales.

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