Arellano habla de honestidad

Evitan polémicas
OCTAVIO ZÚÑIGA
NOTA PUBLICADA: 5/6/2010

Necaxa no entrará en polémicas respecto al arbitraje, después de la declaración que hizo José Luis Salgado ayer al término del encuentro señalando que el árbitro benefició a los rayos del Necaxa al expulsar de forma “dudosa” al medio campista Alejandro Corona.
Esto lo dio a conocer el técnico de los rayos Omar Arellano en la rueda de prensa tras el encuentro al ser cuestionado sobre esta situación.

“Yo siempre he respetado el punto de vista de los entrenadores a lo largo de estos seis meses me he preocupado más por mi equipo, hoy (ayer) yo creo que de lo que tengo que hablar es de la honestidad que mostró mi equipo en la cancha”, dijo.

Detienen a aficionados
REDACCIÓN/Gladys Solís
NOTA PUBLICADA: 5/6/2010

Aún y cuando las porras fueron advertidas que habría retenes antes de entrar a la ciudad de Aguascalientes, más de 300 aficionados “arriesgaron el pellejo” para llegar hasta el estadio Victoria, sin imaginar que durarían largas horas en espera para poder lograr su objetivo.
Los dos primeros camiones que salieron del Nou Camp fueron los únicos en atravesaron el primer filtro a la ciudad de los rayos, pues otros 10 fueron detenidos por autoridades del Estado durante más de 3 horas, desde la 1:20 hasta las 5 de la tarde.

El chofer de otro de los camiones que salió optó mejor por regresarse

“Ya dejamos pasar a uno de los autobuses y se armó bronca en el estadio, de aquí para adelante se esperan y sólo los que traigan boletos pasan”, comentó el oficial Piña, de la Policía Estatal de Aguascalientes, uno de los que participó en el operativo represivo.

Los aficionados que viajaban a bordo del autobús 3, fueron los primeros en ser detenidos por la policía y obligados a bajar para ser revisados.

Con perros entrenados y armas largas, los policías verificaron a cada uno de los pasajeros, incluyendo a Marcela Tapia, de 23 años, quien tuvo que abrir las piernas mientras una uniformada pasaba las manos entre sus muslos para revisarla.

Luego de inspeccionar el camión y encontrar más de 20 botellas de cerveza, los oficiales accedieron dejar pasar a la “flota verde”, siempre y cuando todos mostraran su boleto.

“Tenemos órdenes de nuestros jefes de que no pueden pasar a la ciudad a menos que tengan boleto, los que no traigan ya no se pueden subir a los camiones y se quedan aquí abajo, el regreso (a León) ya es bajo su responsabilidad”, indicó el oficial Piña.

“No nos puedes detener oficial, es una violación a la ley y nuestra libertad”, decía Gerardo López, quien iba acompañado de su esposa.

Ambos carecían de boleto.

Molestos con la actitud de los oficiales, decenas de aficionados levantaron las manos para pedir un aventón al estadio, mientras Miguel Ángel Torres, uno de los organizadores, hablaba con los uniformados.

“Balta tiene las entradas de los demás, hay que esperar que llegue él”, decía Miguel.

Cuando el autobús de El Balta llegó al retén, también fue detenido por los policías, quienes una vez más pidieron a todos mostrar sus boletos, así como a El Balta entregar las entradas de los que faltaban.

Entre que arrancaba el camión, que llegaban más autobuses, que verificaban a los pasajeros, el retén dio por terminada su labor a las 5 de la tarde, hora en que la flota de camiones fue escoltada hasta el estadio Victoria por varias patrullas de tránsito municipal y Policía Federal.