La fiesta del campeón

GLADYS SOLÍS / Publicada el 24/12/2013

Miles de leoneses acompañaron a los Verdes y luego se congregaron en el Jardín Principal.
 
En el balcón de Presidencia Municipal un trofeo plateado generó un grito generalizado en el Centro Histórico.

Más de 25 mil personas (según Protección Civil), en la Plaza de los Mártires aflojaron la garganta y levantaron la voz justo en el momento que Mauro Boselli tomó el trofeo de la Liga MX y lo levantó al cielo.

Las banderas se agitaron en toda la plaza. La afición vestida de verde cantaba la victoria que el domingo 15 de diciembre consiguió su equipo frente al América en el Estadio Azteca.

“¡Olé, olé, olé, olé, León Campeón! ¡Olé, olé, olé, León Campeón!”, coreaba la hinchada leonesa que forraba la plaza. Unos arriba del la base de la Bandera monumental, otros en las bancas, en el nacimiento (a un lado de José) y los más valientes en las copas de los árboles. Todo como parte del desfile de la victoria esmeralda por la sexta estrella.

En Presidencia Municipal los presentaron como los campeones. Entonces, Bárbara Botello, la alcaldesa de la ciudad, salió al balcón a acompañar a los jugadores que cantaban con la porra.

Ni ella, ni los Verdes dieron un discurso oficial pero sí besó la Copa y la levantó junto con Mauro Boselli y Rafa Márquez. Después de ser abucheada se retiró del balcón.

El desfile comenzó a las 3:30 de la tarde en el Estadio León y terminó dos horas después en Presidencia. En ese lapso, las calles se convirtieron en un mar de aficionados preparados para celebrar lo que hace ocho días quedó pendiente.

Los campeones recorrieron el bulevar López Mateos, luego las calles Madero, Pedro Moreno hasta la Miguel Alemán (donde no se tenía contemplado pasar); siguieron una vez más por el López Mateos y 20 de Enero para terminar en Presidencia.

En el balcón los jugadores permanecieron media hora escuchando los cánticos y porras que hasta ellos mismos tarareaban, como Nacho González y Edwin Hernández. Tras entonar “Caminos de Guanajuato” se fueron sin más discurso.

Mientras estaban en el balcón, Matías Britos y Jonny Magallón aprovecharon para grabar el festejo con sus celulares. William Yarbrough y Rafael Márquez admiraban la cantidad de gente que se juntó en la plaza; a un costado, Jesús Martínez no dejaba de sonreír.

“¡Rafa! ¡Rafa! ¡Rafa!”, gritaban enloquecidas las fanáticas. Rafa se tocó el pecho en agradecimiento y se retiró del balcón.

Ya entonces, la afición leonesa era dueña de su alma y, como hace una semana, sólo pudo sonreír.

Celebración desde África

Desde Las Joyas, El Coecillo y, León 1, hasta de Costa de Marfil, África llegaron los aficionados de León al Centro Histórico a la celebración.

La ley no importó. Valió subirse a los árboles, a las lámparas de alumbrado público o a los edificios de la Plaza de los Mártires para encontrar un mejor ángulo y así ver con mayor claridad a sus jugadores preferidos.

Alain Tchadi, quien desde hace tres años viajó desde su natal África a León, mostró un apoyo singular.

“Mi jugador favorito es Luis Montes porque cuando no está él, no juegan igual”, dijo el africano que llegó a León a impartir clases de inglés, francés y música. / Christian García