OCTAVIO ZÚÑIGA / ENVIADO A CIUDAD DE MÉXICO Publicada el 26/11/2015
Guillermo Burdisso reclama al central la marcación del penal que inventó sobre Andrés Rentería.
La Liguilla es otro torneo, lo malo que aquí León también es un pésimo visitante.
La Fiera cayó en la cancha del estadio Azteca, 4 por 1 a consecuencia de dos desafortunados errores de la defensa y un penal regalado por el árbitro. Ahora necesita un milagro en el Nou Camp para avanzar a las semifinales.
Las cosas se pusieron raras en el duelo de ida. Juan Antonio Pizzi, noinició sin centro delantero natural, aunque Marco Bueno estuviera disponible.
La esperada sorpresa que tenía preparada Pizzi era meter a Carlos “Gullit” Peña como punta, que de inicio no sonaba tan descabellado porque fue el segundo mejor goleador del equipo en temporada regular.
Y parecía que la apuesta esmeralda funcionaba porque de inicio los Verdes dominaron el encuentro.
El buen arranque de juego del León se materializó al minuto 10 en un tiro de esquina cobrado por Luis Montes y que Paul Aguilar desvió y mandó travesaño. En el rebote Nacho González anticipó la marca y de cabeza empujó el balón al fondo de la red. para el 0-1.
Después de ahí, ya todo el primer tiempo se pinto de amarillo, gracias a la complacencia de la defensa esmeralda.
El América con poco orden pero mucha garra encontró el empate en un tiro de esquina que cayó en los pies Paolo Goltz. El defensor mandó un tiro al marco que fue desviado por Aldo Rocha, pero que no quitó la dirección de gol.
Después Jonathan Gonzales se lesionó. Darío Burbano ocupó su lugar.
América aprovechó de nuevo las carencias del León. En tiro de esquina a favor del Ave, el “Gullit” no pudo despejar el balón y lo dejó a los pies de Paul Aguilar que aprovechó el “regalito” para darle la vuelta al partido.
Para colmo de males, el árbitro César Ramos sancionó como penal un “clavadazo” de Andrés “Rifle” Andrade, ante el achique de William Yarbrough. Darío Benedetto, marcó el tercero.
Como todo estaba destinado a salir mal, en un tiro de castigo, Michael Arroyo agarró mal parado a William Yarbrough y colocó el balón pegado a su poste y poner el cuarto de la noche para los “Cremas”.
El estadio Azteca pedía el quinto, mientras los jugadores esmeraldas caminaban en la cancha, ya con poca ambición por recortar el marcador.
Al final la diferencia entre los Verdes y las Águilas fue abismal no en futbol, pero sí en actitud.
La única opción es el milagro en el Nou Camp, en espera de que Mauro Boselli esté de vuelta y con la puntería fina.
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