EL SOL DE LEON
¡Qué vergüenza!
Denis Caniza se lamenta tras los errores defensivos. Foto: Eduardo Maceira / El Sol de León.
El Sol de León
8 de agosto de 2010
Y Los Directivos, Brillaron Por Su Ausencia
Omar Oseguera
León, Guanajuato.- Esto ya es más que vergonzoso, es un verdadero desastre.
Aquí los porqués:
León cambió de técnico y se supone que debería ir a la alza, "salvando el barco" como lo declaró su Presidente, la dura realidad indica que está peor, sumergido en lo más hondo de la tabla de la Liga de Ascenso.
Sí, anoche llegó más, ¿y...? El resultado volvió a ser el mismo: una derrota de 2 a 1 ante el líder Tijuana.
Ok sí, Luis Nieves cambió el ataque felino, le puso movilidad, dinámica, chispa, llegada, pero... también falló en el último toque.
Sergio Orduña modificó su 5-3-2 a 4-4-2 para que no nos quedara duda que iba por el triunfo, a final de cuentas nunca llegó.
Jared está perdido, corre y brinca hasta donde puede pero no pesa, no tiene oportunidades de gol ni mucho menos jala marca.
Fígoli es intermitente y en las que dribla no manda un buen centro.
Ruvalcaba nunca ataca, Mario Ruiz lo hace pero sus centros terminan en nada.
Santibáñez mete, busca, intenta, pero no tira.
Atrás Caniza y Nacho González parece que ni se conocen.
Polo y Corona no tejen jugadas, se dedican más a patear rivales que a meter pases filtrados con peligro.
Blas Pérez entra para pelearse con el rival, Bonells no es un Ronaldo, Híbert le pega muy abajo a la bola y Julio Ceja... se come la banca.
De nada sirvieron cambiar la actitud y jugar ante una Cueva casi llena, el peor León en un arranque de torneo en esta división ligó su segunda derrota en el Apertura 2010 para mantenerse con un miserable punto de 12 posibles. ¡Uno de doce!
Y para colmo, como ya es una tradición, el "Chuleta" Orozco con todo y no estar al cien, se levantó de la banca canina y sepultó a sus "ex" con un golazo que hizo recordar buenos tiempos del torneo pasado.
León ya no puede caer más bajo: ya fue goleado, ya perdió en casa y fuera de ella, peor no puede estar.
Cero peligro en las áreas
El choque entre Xolos y Esmeraldas fue cerrado en la primera parte, con un balón sin dueño que iba de allá para acá pero sin verdadero peligro.
Es decir, en todos los primeros 45 minutos no hubo jugadas claras que hayan puesto en aprietos a los arqueros Roldán y Zermeño.
León optaba por los centros largos a la olla en busca de Jared, mientras que Tijuana eligió las triangulaciones siempre. Enríquez y Gerk pusieron a trabajar en serio a Polo y Corona en la contención, y en una casi facturan pero Mauro sacó las "tablas".
Cuando Nieves se enfiló con idea al arco rival, el central le pitó una mano que acabó con un disparo cerca del poste.
Antes el "melenudo" Ábrego se puso nervioso dentro del rectángulo felino y su cabezazo lo mandó a las manos de Roldán cuando pintaba para más.
Siempre que Fígoli ligó con Jared la jugada terminó, y cuando buscaba a Nieves concluía con un centro a zona de nadie o cortado por los fronterizos.
Abucheos y toda clase de improperios
Así podemos titular el final del segundo tiempo, primero con la salida del campo de Jared Borgetti; ¡Buuuuuuuuuuuuuu...! De parte de la afición.
Después con la entrada del "Chuleta": ¡Buuuuuuuuuuuuuu...! Traidor, vendido y mediocre fueron algunos de los elogios para el ex Verde.
Y al final con el silbatazo de Toño Pérez: ¡Buuuuuuuuuuuuu....! Este sí eterno y además acompañado de frases que superan lo ofensivo.
Sin embargo hay que decir que fue León quien estuvo primero más cerca del gol con Luis Nieves, en la primera le faltó reacción, en la segunda un poco de puntería y en la tercera de plano un poco de suerte.
Enseguida de estas jugadas del nayarita cayó el gol canino; un centro por la derecha techó a Caniza y Gerk no perdonó con la pierna. Luego León se desesperó, modificó y nada pasó.
Al 85´ el "Chule" aprovechó una duda de Caniza y Nacho González y se fue solo a retar a Roldán para quitárselo de forma magistral y sentenciar así el juego.
El gol de Santibáñez al 91´ fue el de la honra, ya era muy tarde, ya hasta la afición se había ido.
León es un desastre, y quien diga que estamos exagerando se niega a ver la realidad.
domingo, 8 de agosto de 2010
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