Una rivalidad

Una rivalidad que trasciende la tribuna
abr 10, 2015

Óscar Jiménez

LEÓN, Gto.- El futbol es una fiesta, pero no siempre, ni en todos los lugares. Aunque el Chivas-León o León-Chivas, congregue a dos equipos históricos del campeonato mexicano, de los más ganadores y cunas de legendas, no significa que el futbol quede libre de manchas. Desde que la Fiera regresó al máximo circuito, el enfrentamiento clásico de la zona occidental del país, se ha visto inmiscuido en actos de violencia fuera de la cancha.

Son cinco enfrentamientos los que se han disputado desde el ascenso del Club León de manos de Gustavo Matosas en la pasada temporada de 2012, y a partir de esto, se han entregado tres triunfos para el chiverío y dos para la Fiera. Y aunque todo pareciera algarabía de goles, las broncas a las afueras del Estadio Omnilife de Guadalajara y León, de la ciudad zapatera, han pintado de gris el duelo.

Recién los Esmeraldas regresaron al campeonato máximo de torneo mexicano, se enfrentaron con Chivas en la jornada 8, de ya un lejano Apertura 2012; un paso esperanzador del Club León pero sobretodo el interés implícito de ‘volver a ver’ a las Chivas en la ciudad del Bajío, hacían que desde la venta de boletos se presentaran algunos conatos de bronca. El verdadero festín de golpes y actos vandálicos vino al término del cotejo en el que vencieron las Chivas por dos a uno, pues a la altura del Teatro del Bicentenario y alrededores del Estadio, grupos opuestos de animación se encararon, usando machetes, pistolas y todo lo que estuviera a su alcance. El saldo fue un joven de nombre Édgar Iván Jasso Aranda, de 18 años, trasladado al hospital por herida de bala, así como Diego Antonio Hernández Carbajal de 29 años, quien recibió golpes con un tubo metálico a la altura del brazo. Atropellos y peleas entre aficionados y policías, fue la culminación de aquella trágica noche.

La sangre retomaría el rio un semestre después, pero de la peor manera. En el bajo mundo del futbol, salvajemente y en fanatismo, se tiene una ley no escrita: ‘la sangre se paga con sangre’, y la Fiera tenía que visitar el Omnilife. El torneo le había dado un duro revés a los de Gustavo Matosas, y en Guadalajara sufrirían de nueva cuenta por 2-1 ante los rayados. Pero fue lo menos importante, cuando antes de abordar al estadio, la violencia ya se había hecho presente; decenas de camiones provenientes de Guanajuato, fueron intersectados un kilómetro antes de la caseta de cobro de la autopista a Tlaquepaque, siendo apedreados por una veintena de pseudoaficionados tapatíos. A partir de esto, se desató el caos a las afueras del Omnilife, seguramente marcando uno de los episodios más tristes en la corta historia del inmueble. Centenas de leoneses y tapatíos, ni siquiera presenciaron el partido, al ser atendidos por médicos auxiliares.

Un torneo después (Apertura 2013) León campeonaría en la primera de dos ocasiones consecutivas, pero antes, tendría que recibir a las Chivas en casa. Con los antecedentes inmediatos, 650 elementos de seguridad municipal y 320 de policía especializada, hicieron acto de aparición en los alrededores y al interior del estadio.

Además, se prohibió el viaje en camiones organizados de aficionados tapatíos, y se les retuvo antes de entrar a la ciudad; sin embargo, 200 almas chivas, presenciaron aquel compromiso desde el espacio para visitantes, pero sin mayores contratiempos más que los verbales, pues a su salida, 20 minutos después de terminado el partido, los elementos de policía los supieron encapsular para evitar cualquier agresión. En el campo, la Fiera había salido victoriosa del encuentro por dos goles a uno.

Los verdes consolidarían el bicampeonato en el Clausura 2014, pero eso no los dejaría exentos de caer ante Guadalajara, que con un solitario gol de Giovani Hernández, se apuntaron aquella ocasión, primera, desde el regreso del Club León a primera división, que no se presentaron brotes de violencia, a pesar de la no excesiva seguridad por elementos policiales. El buen camino lo retomaron en León, con el último compromiso de liga entre ambos equipos; un 2-1 se firmó para León en el Apertura 2014, pero ya sin problemas de vandalismo y violencia.

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